En lo más hondo de sí misma, toda persona puede hacer la experiencia de dimensiones transcendentes. Se trata de realidades experimentadas como íntimas e inmanentes y, al mismo tiempo, como infinitas, absolutas y transcendentes, esto es, no reductibles a la persona y a la percepción que ella tiene de esas realidades que la transcienden.

La «Transcendencia» es nombrada de formas diferentes por las personas: 

• Algunos la llaman Amor: experimentan a nivel profundo como si ese Amor tuviese una dimensión infinita…Otros la llaman Verdad: perciben que hay una Verdad vasta e infinita que les desborda…. Otros la llaman Justicia: tienen la intuición de que hay un «más allá» de lo que se puede realizar para que haya justicia en la tierra… 

• Otros la llaman Dios (con un nombre particular según las religiones). Perciben a Dios como una «Presencia» en lo más intimo de sí mismos y tienen conciencia de que este Dios les habita y les desborda por todas partes.

Con muchos autores, particularmente de la psicologia humanista, Novahumanitas reconoce que la relación consciente y la experiencia intima de estas dimensiones transcendentes, y sobre todo de Dios, contiene un potencial impresionante para conducir a la persona hacia su realización total y la mantiene en un continuo movimiento de apertura y de búsqueda de la plenitud que le es accesible. 

En sus acciones de formación, Novahumanitas respeta profundamente la apertura o no a la Transcendencia de cada uno de los participantes. No obstante, en las sesiones específicas de «Apertura a la Transcendencia» el Dios en que Novahumanitas cree es el Dios-Trinidad revelado en Jesucristo. Es en la experiencia y en la intimidad de este Dios que ayuda a penetrar a las personas que así lo desean.